Hombres y mujeres de ciencia (4º)

HOMBRES Y MUJERES DE CIENCIA EN LA ANTIGÜEDAD



PITÁGORAS



Filósofo griego del s. VI a.C., fundador de una secta que tuvo gran influencia en el mundo helénico. No dejó ninguna obra escrita; desde el s. V, la leyenda le presentó como un ser sobrehumano, sabio, taumaturgo y profeta. La tradición le atribuye la paternidad del teorema sobre el cuadrado de la hipotenusa y de la tabla de multiplicar. Sus estudios dieron origen a investigaciones geométricas, aritméticas, astronómicas y físicas.

DIOTIMA (siglo V a. C.)

Fue la maestra de Sócrates.

ARISTÓTELES



Filósofo griego. A los diecisiete años se estableció en Atenas para seguir las lecciones de Platón. Fue preceptor de Alejandro Magno desde 343 y se estableció nuevamente en Atenas en 335, poco tiempo después de llegar al poder su discípulo: fundó la escuela del Liceo, denominada también peripatética porque el maestro daba sus lecciones paseándose con sus discípulos. Sus grandes aportaciones a la física, la biología y las humanidades se deben al predominio de la observación.

EUCLIDES



Matemático griego del s. III a. C. Enseñaba matemáticas en Alejandría, donde fundó la escuela más célebre de la Antigüedad. Es sobre todo conocido por sus Elementos, que continúan siendo considerados como el libro de geometría por excelencia, en el cual figura su famoso postulado. En su Óptica, procede como en geometría, poniendo en cabeza algunas proposiciones fundamentales, la más importante de las cuales admite la propagación de los rayos luminosos en línea recta.

HIPÓCRATES




Médico griego, fundador de la medicina fundamentada en la ciencia, afirmó la necesidad de seguir las enseñanzas de la naturaleza en la terapéutica; subrayó la importancia de la herencia y la adaptabilidad del individuo al ambiente; estableció los deberes del médico por medio de un juramento. Sus escritos fueron hasta el s. XVIII el texto fundamental de la práctica médica.

MARÍA LA JUDÍA (siglo I d. C.)

Escribió importantes tratados y desarrolló técnicas específicas y sofisticados aparatos para la destilación y la sublimación. El baño María, procedimiento que actualmente se sigue utilizando para mantener la temperatura constante, es descubrimiento suyo.

ARQUÍMEDES




Sabio griego. Joven aún acudió a Alejandría para recibir las enseñanzas de Euclides. Perfeccionó el sistema numérico griego. En mecánica se le atribuye la invención del tornillo sin fin. Estableció la ley de la palanca, no pidiendo, dijo, más que un “punto de apoyo para levantar el mundo”. En física, el principio que lleva su nombre fue descubierto por las siguientes circunstancias: mientras se bañaba cayó en la cuenta de que sus miembros disminuían de peso al estar sumergidos en el agua. Con el entusiasmo de su descubrimiento se lanzó a la calle desnudo gritando: “¡Eureka! ¡Eureka!” (“Lo encontré”)


PTOLOMEO




Astrónomo, matemático y geógrafo griego. Se cree que vivió casi toda su vida en Alejandría. Su inmensa obra abarca astronomía, matemáticas, cronología, óptica, geografía, música, etc. Su principal obra es su Almagesto. También se ha hecho famosa su Geografía, que fue impresa numerosas veces en el s. XVI y cuyos mapas proporcionan una preciosa información sobre la historia de los descubrimientos. Construyó diversos aparatos de astronomía, entre los que destacan el astrolabio y el reloj de Sol.


HIPATIA DE ALEJANDRÍA (370-415)



Es la primera mujer de ciencia cuya vida está documentada y aunque la mayoría de sus escritos se han perdido, existen numerosas referencias a ellos. Su nacimiento coincide con los últimos años de la decadencia del Imperio Romano y la consolidación del poder de la Iglesia cristiana, que trató de eliminar cualquier influencia de las ideas paganas. Hipatia fue hija de Teón, un profesor de matemáticas y astronomía del Museo, quien supervisó todos los aspectos de su educación, pues, en una época en la que las mujeres eran consideradas seres inferiores, él estaba decidido a que su hija se convirtiera en  un “ser humano perfecto”. Viajó por Atenas e Italia, adquiriendo todos los conocimientos de la época. Al volver a Alejandría se dedicó a la enseñanza de las matemáticas y la filosofía. Enseñó a gentes de todas las religiones e ideologías, destacándose por su tolerancia. Fue nombrada oficialmente profesora de filosofía y enseñó también matemáticas, astronomía y mecánica.
Su trabajo más importante fue en álgebra en relación con las ecuaciones diofánticas. Juntamente con su padre escribió un tratado sobre la Geometría de Euclides, un libro sobre los trabajos de Ptolomeo y un tratado sobre las crónicas de Apolonio. Realizó también trabajos en mecánica y tecnología práctica. En su labor de investigación diseñó instrumentos científicos, como un astrolabio para medir la posición de las estrellas, los planetas y el Sol y calcular el tiempo y los signos del zodiaco. También un destilador de agua, un medidor de nivel y un densímetro de líquidos. Hipatia, pagana y científica racionalista, se convirtió en una figura política influyente por su relación con Orestes, prefecto romano de Egipto, alumno y amigo suyo. Por todo ello fue considerada una “persona peligrosa” contra la que se volvían las iras y el fanatismo del Patriarca de Alejandría, Cirilo, que en el año 412 decretó la persecución del paganismo y de la vida intelectual. Hipatia fue asesinada tres años más tarde (415) por monjes de la Iglesia de San Cirilo de Jerusalén. Orestes informó de su muerte y pidió a Roma una investigación que fue propuesta por “falta de pruebas”. Más tarde Cirilo fue canonizado.


LA CIENCIA EN LA EDAD MEDIA


TRÓTULA DE SALERNO (siglo XI)

Fue una de las científicas más famosas en la Edad Media. En su libro Los dolores de las mujeres, antes, en y después del parto es el mejor libro sobre el cuidado de la madre y de las criaturas desde su nacimiento. Incluye la mayoría de las enfermedades infantiles. Su tratado se enseñaba en las universidades y tuvo una gran incidencia en la medicina de la Edad Media. En el Renacimiento se cambió su nombre para masculinizarlo y se la llamó Trottuus. En el siglo XX se la borró de la historia de la medicina.

HILDEGARDA DE BINGEN (1098-1179)



Nació en una familia terrateniente y a los ocho años entró en el convento benedictino de Disiboderberg, donde la abadesa, su tía Jutta, se encargó de su educación, en la que figuraba, como mínimo, Latín, Sagradas Escrituras, Oraciones y Música. En 1136 sucedió a su tía en el cargo, convirtiéndose en la abadesa más influyente y una de las científicas más importantes del siglo XII. Altos dignatarios de la Iglesia y jefes de Estado le pidieron asesoramiento, y sus enseñanzas de medicina y teología se difunden por los centros influyentes de la época. Liber Svicias, que incluye la primera cosmología, fue el más influyente de sus tratados. Durante diez años estuvo trabajando en una enciclopedia de Historia Natural, publicada en Estrasburgo en 1533, con el título de Phisica. En ella incluye la descripción de plantas, árboles, peces, reptiles, pájaros, mamíferos, piedras y metales, así como sus aplicaciones prácticas en medicina. También contiene una nomenclatura botánica en alemán que sirvió de base para otras posteriores. Es el más científico de sus trabajos junto con Causae et Curae. Todos ellos fueron utilizados en las facultades de medicina. Hildegarda de Bingen es además una de las primeras recopiladoras de los conocimientos griegos, introducios en Europa a través de España e Italia por los pueblos árabes. Es autora, junto con Herrad, abadesa de Hohemberg, de  El Jardín de las  Delicias, una enciclopedia de religión, historia, astronomía, geografía, filosofía, historia natural y botánica médica. Ambas, abadesas eruditas, son un ejemplo de las científicas medievales, que después fueron prácticamente olvidadas. Su legado lo recogen las mujeres de los salones científicos, en los siglos XVII y XVIII.


GUTENBERG



Impresor alemán. Establecido en Estrasburgo en 1434, se interesó, a partir de 1438, en una técnica rodeada del más riguroso secreto, pero inidentificable con el procedimiento de la impresión con caracteres móviles: la tipografía. Perfección su invento; en 1440 se asoció con Johann Fust y ambos formaron la razón social Das Werk der Bücher. En 1455, terminó su primera obra: la famosa Biblia latina a doble columna, llamada “de cuarenta y dos líneas”.


LA CIENCIA EN EL RENACIMIENTO

LEONARDO DA VINCI (1452-1519)



Pintor, escultor, ingeniero, arquitecto y sabio italiano. En 1482 se trasladó a Milán y  se ofreció como arquitecto, ingeniero militar, pintor y escultor a Ludovico Moro, quien lo empleó. Abordó también problemas de arquitectura y participó en las discusiones sobre la construcción de las catedrales de Milán y Pavía. Paralelamente a estos trabajos proseguía una intensa labor de investigación. Planeaba publicaciones sobre perspectiva, anatomía, mecánica, que no llegaron a publicarse; su obra permaneció ignorada hasta la edición de sus manuscritos.

NICOLÁS COPÉRNICO (1473-1543)



Astrónomo polaco. Considerado el fundador de la astronomía moderna. Demostró que los movimientos aparentes del Sol y de las estrellas se podían explicar admitiendo el doble movimiento de la Tierra, su rotación diaria sobre su eje y su traslación anual alrededor del Sol.
Esta explicación implicaba el desplazamiento del centro del sistema planetario de la Tierra al Sol. Esta tesis heliocéntrica, establecida ya en la Antigüedad por Aristarco de Samos, contradecía la tradicional teoría geocéntrica de Ptolomeo y, lo que era peor, desplazaba al hombre del centro del universo, poniendo en entredicho la teología cristiana.

PARACELSO (1493-1541)


Médico y alquimista suizo. Hijo de médico, combatió a la medicina clásica (Galeno, Avicena); explicó sus lecciones en lengua vulgar, en este caso el alemán. Sus éxitos en la práctica médica y elocuencia le proporcionaron gran fama, oscurecida por sus teorías mágicas y por los celos de los médicos y farmacéuticos de su época, a los que combatía.
Abrió una vía a la doctrina de los específicos, considerando que cada enfermedad necesita su tratamiento contra las teorías de la panacea universal. Fue el primero en creer que algunos venenos a pequeñas dosis eran excelentes medicamentos.

MIGUEL SERVET (1514-1553)


Científico aragonés. Descubrió la circulación pulmonar de la sangre. Expuso y defendió esta teoría. Otros intereses de este hombre de ciencia fueron: astronomía, meteorología, geografía, jurisprudencia, teología, matemáticas y anatomía. Murió en la hoguera condenado por la Inquisición por herejía y blasfemia contra la cristiandad.

OLIVIA SABUCO DE NANTES BARRERA (1562 –1622)

Científica y escritora castellana. Escribió un libro dedicado a Felipe II con el título de Nueva filosofía de la naturaleza del hombre, no conocida ni alcanzada por los grandes filósofos antiguos, la cual mejora la vida y la salud humana, que se imprimió en Madrid, en 1578. Al año siguiente se hizo la segunda edición, corregida y aumentada.

GALILEO GALILEI (1564 – 1642)

Astrónomo y físico italiano. Sus descubrimientos le hicieron rápidamente famoso. Aparece como el fundador de la dinámica. Fue uno de los primeros en emplear los termómetros de líquido, dictó la ley de los vasos comunicantes e ideó la balanza hidrostática. Comenzó el estudio de los astros. Fue entonces cuando fue sometido a la Inquisición, delante de cuyo tribunal debió comparecer con setenta años de edad (1633). El procesó duró veinte días: apenas se defendía y fue obligado a pronunciar de rodillas la abjuración de su doctrina. La tradición cuenta que, al levantarse, golpeó con el pie el suelo y gritó: “¡Y sin embargo se mueve!”


EL SIGLO XVII




TORRICELLI (1608 – 1647)




Físico y matemático italiano. Atrajo la atención de Galileo por unos trabajos sobre el movimiento de los cuerpos pesados. En 1643 realizó la experiencia que lleva su nombre y de la que deriva el descubrimiento del barómetro. Utilizando un tubo de mercurio, descubrió y determinó el valor de la presión atmosférica. Es también el inventor de un termómetro.

MARÍA SYBILLA MERIAN (1647-1717)





Entomóloga alemana sentó las bases empíricas de la entomología europea. En el taller de su padre, en Frankfurt, aprendió las técnicas de la ilustración, el dibujo, la pintura y el grabado al aguafuerte, por lo que sus trabajos fueron importantes también para la historia del arte
Viajó a la colonia holandesa de Surinam y a la India para estudiar la flora y la fauna de ambos países. Publicó después “La maravillosa metamorfosis y alimentación especial de las orugas” donde recoge, en 15 grabados, el ciclo de la vida de cada insecto: desde el huevo, la oruga hasta la mariposa.
En su casa enseñó entomología a chicas, incluida su propia hija, introduciéndolas en las nuevas técnicas que va experimentando. Entre sus discípulas se encuentra María van Schurman, que se convirtió en una defensora pública de la educación científica de las mujeres.
Con su hija Dorotea realizó el segundo viaje a Surinam donde pasaron casi dos años coleccionando y pintando insectos y plantas, que publicaron en una obra titulada:“Metamorfosis de los insectos de Surinam”. La segunda edición se completó con el trabajo de su hija mayor, Johanna, que volvió a Surinam para proporcionar a su madre los dibujos de nuevos especímenes. Su libro “Metamorfosis” fue muy difundido y muy utilizado en el estudio de la historia natural durante los siglos XVIII y XIX.

ISAAC NEWTON (1642 – 1727)


Físico, matemático y astrónomo británico. Realizó descubrimientos fundamentales: el cálculo infinitesimal, la naturaleza de la luz blanca y la teoría de la gravitación universal. Expuso sus teorías sobre la composición de la luz blanca y completó la explicación del arco iris que había dado Descartes. En 1671 construyó él mismo su telescopio de espejo. Su obra desarrolla la teoría sobre la atracción universal, expone las leyes del choque, estudia los movimientos de los fluidos, calcula la precesión de los equinoccios, da la teoría de las mareas, etc.


EL SIGLO XVIII


LADY MARY MONTAGU (1689-1762)

Perdió a su madre muy pronto y su padre, el duque de Kingston, no se interesó mucho por la familia, Mary se educó a sí misma aprovechando la biblioteca paterna. En 1712 huyó con Edward Wortley Montagu, para librarse de un matrimonio convenido.
Introduce la inoculación contra la viruela en Europa, que ya era conocida desde la antigüedad en la India, China y Oriente Medio, contribuyendo así a sentar las bases para la teoría de los gérmenes de la enfermedad y la introducción de la vacuna como medida preventiva frente a las enfermedades.
Vivió en Constantinopla con su marido, que era el embajador de Inglaterra en Turquía. Allí vio por vez primera la variolización (un tipo de inmunización contra la viruela) y escribió el procedimiento en una carta a su amiga Sara Chiswell. Aprendió la técnica de la inmunización, consistente en inocular con una aguja pus de las pústulas de las personas afectadas en otras sanas. La viruela resultaba fatal en un 2-3 % de los casos con la inoculación, frente a un 20-30 % de muertes sin la misma.
Cuando volvió a Inglaterra vacunó a su hija y experimentó con prisioneros condenados a muerte y huérfanos. Con la ayuda de la princesa de Gales, que hizo inocular a dos de sus hijas, su práctica se extendió por todo el país, a pesar de las oposiciones de la Iglesia y de la profesión médica.
Fue una activa y abierta defensora de los derechos de las mujeres, lo que le mereció el calificativo de tener “una lengua como una víbora y una pluma como una navaja”. Sus tomos de diarios y cartas, escritos conscientemente para la posteridad, figuran entre los documentos literarios más importantes de la Inglaterra del siglo XVIII.
A los cuarenta y siete años se enamoró del escritor científico Francisco Algarotti, de veinticuatro años, se separó de su marido y se fue con el escritor a Italia. Algarotti se trasladó a Berlín, a la corte de Federico el Grande, y ella permaneció en Venecia, donde estableció un salón en el Gran Canal. Desde allí escribe a su hija explicándole las razones que la mantenían en aquel país, donde una mujer culta no era considerada ridícula, en el que las grandes familias están orgullosas de tener hijas cultas y donde se puede ser profesora en la Universidad, como María Agnesi, que era catedrática de matemáticas en Bolonia.
Más tarde, en los siglos XVIII y XIX, otras mujeres de ciencia habrían de huir de la agobiante atmósfera de Inglaterra para ir a la más acogedora Italia.


BENJAMÍN FRANKLIN (1706 – 1790)

Filósofo, físico y político norteamericano. Se dedicó sobre todo a investigaciones sobre los fenómenos eléctricos. Descubrió el poder de las puntas metálicas y enunció el principio de conservación de la electricidad. Una serie de trabajos le llevaron a descubrir en 1752 la naturaleza eléctrica del relámpago y la invención del pararrayos.

JENNER (1749-1823)


Médico británico. Ejerció toda su vida como médico rural y el ambiente campesino le permitió realizar la serie de observaciones que le llevaron al descubrimiento del método de inmunización contra la viruela por medio de la vacuna. La denominación “vacuna” se ha extendido posteriormente a todas las técnicas utilizadas para inmunizar ante alguna enfermedad.

MARÍA GAETANA AGNESI (1718 – 1799)

Niña prodigio, hija de un profesor matemático, que a los nueve años hablaba francés, italiano, hebreo y alemán, escribió un discurso defendiendo la educación de las mujeres y debatía con hombres matemáticos sobre distintos temas científicos.
Hasta los 20 años nunca pudo estudiar matemáticas, porque a la muerte de su madre se dedicó a cuidar a sus 20 hermanos. A esa edad quiso entrar en un convento, pero su padre se lo impidió.
En 1748 publicó Instituciones analíticas, considerado el mejor tratado de cálculo diferencial, traducido al francés y al inglés.
Nunca pudo entrar en la Academia Francesa por ser mujer. Pero fue elegida para ser miembro de la Academia de Ciencias de Bolonia, de cuya universidad fue designada catedrática de matemáticas por el papa, Benedicto XIV, sustituyendo a su padre. En 1752 ingresó en una orden religiosa de Milán dedicándose a cuidar a mujeres enfermas.


EMILIE DE CHÂTELET (1706-1749)

Contribuyó a la expansión de la revolución científica rompiendo la resistencia europea continental al orden cósmico propuesto por Newton frente a la teoría cartesiana. Es una de las primeras científicas que popularizó la física de Newton y la filosofía natural de Leibniz.
En 1733 conoció a Voltaire y se refugió con él en el castillo de Cirey, propiedad de su marido, convirtiéndolo en un gran laboratorio con bombas de aire, hornos, telescopios, microscopios y demás aparatos científicos y dotándole de una gran biblioteca. El castillo se convirtió en el centro francés de la nueva física newtoniana, desde donde se establecieron contactos con las Academias de Berlín, Escandinavia y Rusia.
Sus trabajos científicos quedaron oscurecidos y ocultados con su relación con Voltaire. “Elemento de la filosofía de Newton” se publicó con el nombre de aquel, quien, no obstante, manifestó que la mayor contribución se debía a Emilie, “lady Newton”, como la llamaba. La discrepancia de ideas entre ambos les llevó a presentar trabajos separados al premio promovido por la Academia Real de las Ciencias sobre la naturaleza del fuego y el calor. Ni Voltaire ni Châtelet ganaron el premio, pero Voltaire se las arregló para que su trabajo apareciera junto con los ganadores en los Anales de la Academia.
Instituciones de la física, escrito en secreto por Châtelet  como un libro sobre los principios de Newton para la educación de su hijo, fue publicado, posteriormente, como anónimo. En él se incluye el desarrollo histórico de la física, resumiendo casi toda la ciencia y filosofía del XVII.
En 1744 publicó una versión revisada de su disertación sobre la naturaleza y la propagación del fuego y su traducción de los “Principia Matemática de Newton” al francés, completada en 1759, con comentarios propios. Es la obra por la que más se recuerda a Châtelet y de los pocos trabajos que llevan su nombre.
Madame de Châtelet escribió a Federico de Prusia: “Júzgame por mis propios méritos o por la falta de ellos, pero no me consideréis como un mero apéndice de este gran general o de aquel renombrado estudioso, de tal estrella que relumbra en la corte de Francia o de tal autor famoso. Soy yo misma una persona completa, responsable sólo ante mí por todo cuanto soy, todo cuanto digo, todo cuanto hago. Puede ser que haya metafísicos y filósofos cuyo saber sea mayor que el mío, aunque no los he conocido. Sin embargo, ellos también no son más que débiles seres humanos, y tienen sus defectos; así que, cuando sumo el total de mis gracias, confieso que no soy inferior a nadie”

JAMES WATT (1736 – 1819)


Ingeniero y mecánico escocés. Con motivo de la reparación de un modelo reducido de la máquina atmosférica de Newcomen, llevó a cabo una serie de ensayos sobre la vaporización del agua, y realizó la condensación del vapor en un recinto o vaso especial, el condensador, distinto del cilindro, con el que comunicaba por medio de un tubo.


A.L .LAVOISIER (1743- 1794)

Científico francés, considerado el fundador de la química moderna. Estudió principalmente el oxígeno y el hidrógeno, la composición del aire y del agua. Enunció el principio de conservación de la masa, en virtud del cual los cuerpos no se destruyen sino que se transforman. Distinguió los cuerpos simples de los compuestos.

ALESSANDRO VOLTA (1745 – 1827)


Físico italiano. Se ocupó en trabajos sobre la electricidad, inventó el eletróforo y el electroscopio condensador. Estableció su “teoría de serie de tensiones” para los metales y esto le condujo en 1800, al descubrimiento de la pila eléctrica.

EULER (1707-1783)

Matemático suizo. Publicó un Tratado completo de mecánica, en el cual aplicó el análisis matemático a la ciencia del movimiento. Su teoría de los isoperímetros, permite determinar las cuervas o las superficies para las cuales ciertas funciones indefinidas son mayores o menores que para todas las otras.

CAROLINE HERSCHEL (1750-1847)

Nació en Hannover en una familia de músicos. A los veintidós años de edad se fue a Inglaterra para aprender música, donde llegó a ser una soprano de éxito. No obstante, cuando su hermano William se dedicó a la astronomía, ella abandonó la música, se formó en esta materia y se convirtió en su colaboradora. Construyeron grandes telescopios con los que pudieron observar estrellas y galaxias lejanas, rebasando los límites del sistema solar e inaugurando la astronomía sideral.
El 1 de agosto de 1786, Caroline Herschel pasó a ser la primera mujer que recibió reconocimiento por haber descubierto un cometa. William, con la ayuda de Caroline, descubrió mil estrellas dobles, demostrando que eran sistemas binarios conectados por atracción mutua (la primera evidencia de la gravitación universal fuera del sistema solar).
En 1787 fue nombrada asistente del astrónomo de la corte, siendo la primera mujer que obtenía tal cargo. El rey le asignó un salario anual de 50 libras, fue “el primer dinero que conseguí en toda mi vida, me sentí en libertad de gastar a mi antojo”.
Ese mismo año Caroline Herschel se encargó de hacer para su hermano un proyecto enorme: el catálogo de 860 estrellas observadas por Flamsteed, pero no incluidas en el catálogo británico, y un índice general de referencia para cada observación de cada estrella.
Realizó múltiples observaciones de los cometas de Saturno y Urano, mantuvo una extensa correspondencia científica y por primera vez pudo cultivar sus propias amistades, Mme. Beckedorff fue una gran amiga suya y también las princesas reales interesadas en la astronomía buscaban la compañía de la famosa científica.
A la muerte de su hermano William, en 1822, regresó a Hannover, donde a los setenta y cinco años publicó un catálogo de nebulosas observadas por William Herschel en una serie de barridos. En él recoge la localización de 2.500 nebulosas. Por este trabajo recibió la Medalla de Oro de la Real Sociedad Astrónoma. En 1838 fue nombrada componente de la Academia Irlandesa y en 1846, cuando cumplió noventa y seis años, recibió la Medalla de Oro de la Ciencia del Rey de Prusia. Murió a los noventa y siete años. Fue una gran astrónoma y ayudó a abrir la astronomía a otras mujeres del siglo XIX.

MARY SOMERVILLE (1780-1872)

Nació en Escocia y su educación institucional fue muy rudimentaria. No le gustaba la escuela y se dedicó a observar las estrellas y a aprender latín por su cuenta. Descubrió el álgebra en los puzzles de las revistas femeninas. Aunque en su casa trataban de persuadirla de lo aberrante que eran tales actividades para una mujer y le quitaban las velas para impedirle leer de noche, ella memorizaba los libros y resolvía mentalmente los problemas.
Su interés por la ciencia fue fomentado y estimulado por su tío, el doctor Somerville, que le inspiró con sus historias sobre las grandes mujeres cultas del mundo antiguo.
Su segundo matrimonio con William Somerville, miembro de la Real Sociedad de Londres, le dio acceso a la biblioteca de dicha institución y la oportunidad de conocer a muchos científicos y también de relacionarse con otras mujeres científicas, siendo consejera de Ada Lovelace y visitando el observatorio de Caroline y William Herschel.
A partir de entonces Mary Somerville emprendió estudios científicos en profundidad. Su marido recopiló y editó sus manuscritos, mientras ella estudiaba geología y griego; después botánica, meteorología, astronomía, matemáticas y física. Desarrolló una extraordinaria actividad estudiando, escribiendo y realizando experimentos, a la vez que se ocupaba de sus seis hijas e hijos. Como escribió en su autobiografía: “Un hombre siempre puede tener el control de su tiempo alegando que tiene negocios; a una mujer no se le permite tal excusa”.
Su traducción de la Mecánica celeste, de Laplace, incluyó aportaciones propias y permaneció como texto modélico de alta matemática durante todo el siglo.
En su libro sobre La conexión de las ciencias físicas, hizo hincapié en la interdependencia creciente entre las diferentes ramas de la ciencia: astronomía, física, mecánica, magnetismo, electricidad, calor, sonido y óptica.
Ciencias físicas era un trabajo descriptivo que trata de hacer más familiares a las mujeres las leyes que gobiernan el mundo; Geografía física incluía también puntos de vista políticos sobre la esclavitud, conflictos de clase y desigualdades entre las personas.
Sus obras más conocidas fueron traducidas y reeditadas muchas veces.


EL SIGLO XIX



ADA LOVELACE (1815-1852)

Augusta Ada Byron Lovelace nació en Londres, donde pasó una infancia difícil. El matrimonio de su madre con el poeta inglés Lord Byron duró sólo unos cuantos meses. Su separación legal, sin embargo, fue una batalla larga, costosa y muy pública.
Su madre, Lady Byron, que había estudiado álgebra, geometría y astronomía, proporcionó a su hija una formación científica siguiendo su propia tradición.
A los catorce años Ada Lovelace ya era competente en matemáticas, astronomía, latín y música. A los diecisiete años aspiraba a ser mejor matemática que Mary Somerville.
Ada Lovelace y Charles Babbage, profesor de la Universidad de Cambridge, son reconocidos como los precursores del moderno ordenador. Babbage pasó varias décadas gastando fondos públicos e incluso su fortuna privada sin conseguir construir la máquina analítica, artefacto mucho más sofisticado que la máquina diferencial. Las aportaciones originales de Ada Lovelace se referían a la programación de la máquina analítica e ideó varios programas para hacer cálculos matemáticos avanzados. Hizo predicciones referentes tanto a sus aplicaciones, incluyendo la composición musical, como a algunos de los problemas que podrían surgir en el funcionamiento de tal máquina.
Su matrimonio con el conde Lovelace le permitió el acceso a libros y publicaciones científicas  y cuando su marido entró a formar parte de la Real Sociedad los copiaba para ella, ya que Ada Lovelace nunca obtuvo permiso para usar directamente la biblioteca.
Sus fallos en el supuesto sistema infalible para las apuestas de las carreras de caballos la llevarían, a ella y a su marido, a la bancarrota y a poner en entredicho su reputación. El problema estaba en que el diseño de la máquina analítica era demasiado avanzado para la ingeniería de la época. Este desastre hace que queme sus trabajos, los cuales firmaba sólo con sus iniciales porque no estaba bien considerado que una mujer de la nobleza realizara tales tareas.
Murió a los treinta y seis años de edad.

LOUIS PASTEUR (1822 – 1895)


Químico y biólogo francés. Demostró que la fermentación alcohólica está provocada por microorganismos. Sus estudios sobre las enfermedades infecciosas lo convencieron de la necesidad de la asepsia; brindó con la vacunación el método para prevenir y combatir las enfermedades infecciosas. En 1885 terminó victoriosamente sus investigaciones relacionadas con la curación de la hidrofobia.

ALEXANDER GRAHAM BELL (1847 – 1922)

Inventor y físico norteamericano de origen inglés. Se consagró a la fonética. Establecido primeramente en Londres, por razones de salud emigró con su familia a Canadá, sonde se dedicó a enseñar a los sordomudos el lenguaje por signos. Construyó un “oído artificial” que registraba los sonidos en una placa de vidrio embadurnada de negro de humo. Trataba de encontrar un sistema de audición para sordos cuando logó la invención del teléfono (1876), invento que alcanzó en seguida un gran éxito.

SOFÍA KOVALEUSKAIA

(1850 – 1891) y JULIA LERMONTOVA (1846-1919)

Más conocida con el nombre de Sonia Kovaleuski, nació en Moscú en una familia perteneciente a la nobleza rusa en la que existía un gran interés por la ciencia. Su abuelo materno era un eminente matemático y astrónomo alemán y su madre recibió una buena educación.
El interés de Sonia Kovaleuski por las matemáticas surgió tratando de descifrar las fórmulas y los textos de las hojas de cálculo integral y diferencial con que fue empapelada su habitación en su casa de Bielorrusia. Cuando comenzó las clases de matemáticas con un tutor estaba ya familiarizada con las notaciones y fórmulas matemáticas avanzadas.
En esa época la Universidad de San Petersburgo estaba cerrada a las mujeres y para estudiar en el extranjero tenían que estar casadas o tener permiso paterno para conseguir el pasaporte. A pesar de las oposiciones de su familia, su padre accedió a su matrimonio con Vladimir Kovaleuski. La pareja se trasladó a Inglaterra y a partir de aquí la vida de Sonia se convierte en un ir y venir por diferentes universidades europeas tratando de ser admitida en alguna de ellas. Finalmente en Heidelberg consiguió un permiso especial para estudiar física y matemáticas. El éxito de Sonia Kovaleuski en esta ciudad facilitó la asistencia a cursos de química a otra mujer, Julia Lermontova, amiga de su hermana Aiuta.
Más tarde se trasladó a Berlín para estudiar análisis matemáticos con Weierstrass. Como no podía asistir a las clases recurrió a él personalmente y éste le encargaba problemas difíciles para librarse de ella. Finalmente, impresionado por sus soluciones, ejerció como tutor suyo durante cuatro años y consiguió que ella pudiera usar la biblioteca de la universidad.
Una vez finalizada su tesis doctoral vuelve a tener dificultades para su presentación. Weierstrass consiguió por fin que fuese aceptada “in absentia” en la Universidad de Göttingen su disertación sobre La teoría de las ecuaciones diferenciales parciales. Sus trabajos posteriores incluyen estudios sobre los anillos de Saturno y sobre funciones elípticas. “Sobre la reducción de ciertas clases de integrales abelianas de tercer grado a integrales elípticas” se publicó en Acta Matemática en 1884.
Sofia Kovaleuski, se graduó cum laude en 1874 y Julia Lermontova recibió su grado en química, magna cum laude,  en la misma Universidad de Göttingen (Alemania). Kovaleuski y Lermontova  fueron las primeras. Al poco tiempo la Universidad de Göttingen pasó a ser conocida en el mundo entero como un refugio para científicas y matemáticas.
En ninguna parte de Europa había un puesto para una mujer con un doctorado en matemáticas. En Rusia encontró el único trabajo posible para ella: maestra de aritmética en una escuela primaria.
Posteriormente trabajó y estudió en Berlín y Estocolmo. En 1888 ganó el Prix Bordin, el mayor reconocimiento de la Academia de Ciencias Francesa por el mejor trabajo sobre la rotación de un cuerpo rígido alrededor de un punto fijo, que no había conseguido ser resuelto en las cuatro convocatorias anteriores. Su solución era tan general que desde entonces no ha sido investigado ningún caso nuevo de movimiento rotatorio alrededor de un punto fijo.

THOMAS ALVA EDISON (1847 – 1931)


Investigador de Estados Unidos que  inventó la bombilla en 1879.


MURIEL ROBERTSON (1883 – 1973)


Estudió el ciclo vital del tripanosoma en la mosca del sueño en Uganda. Sus investigaciones condujeron al control de la enfermedad del sueño. También llevó a cabo trabajos de investigación sobre la gangrena, que antes de la Primera Guerra Mundial, era una de las principales causas de muerte entre las personas con heridas.


HERTHA AYRTON (1854 – 1923)


Investigadora de origen inglés, estudió el arco eléctrico e inventó el ventilador para ahuyentar los gases venenosos de las trincheras en la Primera Guerra Mundial. Fue la primera mujer miembro de la “Institution of Electrical Engineers” a la edad de cuarenta y cinco años.

FLORENCE RENA SABIN (1871–1953)

Se dedicó a la investigación en medicina en Estados Unidos. Su estudio de las células de la sangre llevó a una mejor comprensión del sistema de defensa del cuerpo. Luchó por una mejor sanidad pública en Colorado y en Denver, logró extender el control radiográfico para la tuberculosis. Dos años después había disminuido en un 50% el índice de fallecimientos por tuberculosis en la ciudad.

SANTIAGO RAMÓN Y CAJAL (1852-1934)


Médico español. En 1889 asistió en Berlín a las sesiones de la Sociedad Anatómica Alemana, donde presentó sus trabajos y descubrimientos acerca del tejido nerviosos y enunció su doctrina de la neurona, que demostraba que cada neurona es una célula independiente en cuanto a su función, estructura y origen. Entre otros trabajos suyos destacan las descripciones de las capas histológicas de la corteza cerebral y de algunos tipos celulares.

CHARLES DARWIN (1809-1882)


Naturalista británico. Instigado por el botánico Henslow, participó como naturalista en la expedición del capitán Fitzroy, que, a bordo del Beagle, visitó América del Sur y las islas del Pacífico. En 1859 publicó su célebre libro El origen de las especies por medio de la selección natural. Los puntos de vista originales que expuso en esta obra y en muchas otras sobre la variabilidad de las especies, después de innumerables observaciones, forman una teoría explicativa de la evolución mediante la selección natural.

MARCONI (1874– 1937)


Físico e inventor italiano. Mientras cursaba sus estudios se interesó ya en los problemas de la telegrafía sin hilos. En 1899 hizo una transmisión a través del Canal de La Mancha enviando un telegrama; en 1901 hizo un enlace entre el continente y Córcega. Intentó entonces, con feliz resultado, atravesar el Atlántico con la T.S.H. mediante una antena montada en Poldhu (Cornuealles) y él mismo fue a Terranova para obtener la recepción (1901).


EL SIGLO XX

 

 

MARIE CURIE (1867 – 1934)


María Sklodowska, química y física polacofrancesa, nació en Varsovia en 1867 y murió en Valence en 1934. Terminados sus estudios medios, no pudo ingresar en la universidad polaca porque no se permitía la entrada a las mujeres. En 1891 se va a París e ingresa en  La Sorbona, donde en tres años se licenció en ciencias físicas (1893) y en 1894 en ciencias químicas, consiguiendo el doctorado en física en 1903 con su tesis sobre lo que ella llamó los fenómenos radiactivos. Allí conoció al que sería su marido, Pierre Curie, con el que tuvo dos hijas: Irene y Eva. La primera fue también Premio Nobel.
Sus investigaciones sobre la naturaleza de las radiaciones emitidas por el uranio, que habían sido descubiertas por Becquerel, le llevaron a la conclusión de que la capacidad de emitir radiaciones era una propiedad atómica. A este proceso Marie le dio el nombre de radiactividad. Pierre, su marido, que había descubierto  la piezoelectricidad, abandonó sus investigaciones para unirse a Marie en el estudio de la radiactividad. Juntos descubren dos nuevos elementos radiactivos: primero el polonio y más tarde el radio. En 1903 Marie y Pierre Curie reciben, junto con Becquerel, el Premio Nobel de física por sus estudios sobre radiactividad.
A la muerte de su marido en 1906 ocupó su lugar en la cátedra de física de la Facultad de Ciencias con la categoría de profesora asistente, convirtiéndose en la primera mujer que enseñó en La Sorbona. Dos años después consiguió ser profesora titular.
El Premio Nobel de química lo recibe Marie Curie por el descubrimiento del polonio y el radio en 1911, siendo la única persona que ha recibido dos veces el Premio Nobel en ciencias. En este mismo año presentó su candidatura a la Academia Francesa de Ciencias, siendo rechazada, debido a lo cual Marie decidió no volverse a presentar.
Durante la primera guerra mundial fue nombrada directora del Servicio de Radiología de la Cruz Roja, cuyo equipamiento había sido diseñado por ella para intervenir en el campo de batalla. Allí trabajó con su hija Irene con quien creó una escuela para formar mujeres en la técnica de los rayos X. Su hija descubrió los neutrones y obtuvo el Premio Nobel en química en 1935.

MILEVA MARIC (1875 - 1948)

Nació en Tifel (antigua Yugoslavia), entonces perteneciente a Hungría. Estudió en el Instituto Politécnico de Zurich (Suiza), donde solamente cuatro mujeres antes que ella habían sido admitidas en esta prestigiosa institución, lo que hace pensar que Maric poseía un talento excepcional y que su falta de reconocimiento se debe a la discriminación de las mujeres en el mundo científico.
Allí conoció a Albert Einstein, con quien en 1902 tuvo una hija, Liesart, de la que no se ha sabido su existencia hasta que se ha publicado la correspondencia entre ambos. Un año después se casaron y de este matrimonio nacieron dos hijos más: uno de ellos padeció esquizofrenia. La pareja se separó en 1914, aunque el divorcio no se produjo hasta 1919. En los acuerdos de divorcio se recoge que Maric recibiría las ganancias de los premios que Einstein pudiera conseguir, como así ocurrió en 1921, al ser galardonado con el Nobel de física y cuya cuantía fue entregada a su primera esposa. Este hecho es uno de los argumentos utilizado a favor de la colaboración de Mileva Maric en los trabajos premiados. Maric desaparece de la escena científica después de su matrimonio. Desde su separación vivió en Zurich, donde murió en 1948.
La investigación realizada por Desanka Trbuhovic-Gjutic, profesora de matemáticas, física y astronomía y publicada en España, nos descubre hasta qué punto fue importante la contribución de Mileva Maric a los logros científicos de Albert Einstein y el injusto trato que recibió de él en los últimos años.

ALBERT EINSTEIN (1879-1955)


Físico de origen alemán. Es el gran sabio de la época contemporánea: sus trabajos en física matemática son tan considerables que han dejado profundo surco en la ciencia moderna. Es conocido sobre todo por su creación de la teoría de la relatividad del tiempo y del espacio. En ella, además de acometer las explicación de fenómenos inexplicados, hasta entonces, llegó a la importante formulación de E=m c² que tanta trascendencia iba a tener en el futuro. Consciente de los peligros que representa para la humanidad la existencia de los explosivos nucleares, intentó con todas sus fuerzas hacer triunfar los proyectos de control internacional de la energía atómica.

IRENE JOLIOT CURIE (1897 – 1956)


Hija de Marie y Pierre  Curie y esposa de Jean Frèdéric Joliot, se formó en el laboratorio de su madre, en el que trabajó hasta su matrimonio (1926). En 1935 recibió el Premio Nobel de físca  por sus investigaciones sobre la radiactividad del polonio y el torio. En 1932 fue nombrada directora del “Instituto del Radium” en París. Publicó más de 50 ensayos científicos.

ALEXANDER FLEMING (1881 – 1955)


Médico y bacteriólogo británico. A partir de 1927 se dedicó al estudio de las propiedades de un moho clasificado en el género Penicilium, y observó que segregaba una sustancia, identificada con el nombre de penicilina, con gran poder de difusión e inhibidora de los estreptococos. En un principio no se concedió importancia a este descubrimiento. En 1940 se logró el aislamiento y deshidratación de la penicilina.

ORVILLE WRIGHT (1871 – 1948) y WILBUR WRIGHT


Hermanos, aviadores y constructores de aviones norteamericanos. En 1900 construyeron un planeador, cuyo sistema de control perfeccionaron posteriormente, y en 1903 un biplano dotado de un motor de 16 CV y dos hélices, con el que Orville efectuó un vuelo de 59 segundos de duración y 266 m de recorrido. Lograron realizar un vuelo de 39 km en circuito cerrado, con lo que se demostró la posibilidad de un completo control del aparato.

ALVA J. FISHER (1862-1947)


Inventa la lavadora electrica en 1901 al utilizar un motor para mover un tambor horizontal donde se coloca la ropa.
La primera lavadora-secadora fue fabricada bajo la dirección de ANGELA BURDETT COUTTS, en 1855, para lavar y secar la ropa de cama de los hospitales de Crimea.

BÁRBARA MCCLINTOCK (1901 – 1992)


Bióloga norteamericana, que recibió el Premio Nobel en 1983. Estudiando los granos del maíz descubre que los cromosomas son el soporte de la herencia. Estableció la existencia de los genes reguladores diez años antes de que lo hicieran Jacob y Monod. Bárbara McClintock se adelantó veinte años con su descubrimiento de la “transposición” de los elementos genéticos de un lugar a otro e incluso de un cromosoma a otro. Su descubrimiento sólo fue aceptado cuando se dispuso de medios técnicos más avanzados y se confirmó la existencia de “genes saltadores” o “transposones” en las bacterias.
El trabajo de Bárbara McClintock fue finalmente reconocido y recompensado, en 1983, con la concesión del Premio Nobel en fisiología y medicina.

MARGUERITE PEREY ( 1909 – 1975)


Física francesa, miembro del equipo de Marie Curie desde 1929,  descubrió el francio en 1939.
Fue directora del Nuclear Research Centre, en Estrasburrgo. Es la primera científica francesa que logró ser elegida integrante de la Academia de Ciencias, después de 200 años de existencia de esta Academia.

RITA LEVI-MONTALCINI (1909 – ) y VÍCTOR HAMBURGER (1900-2001)

Doctora en medicina de origen italiano que se trasladó a la Universidad de Washington para estudiar los factores de crecimiento del tejido nervioso, junto con el bioquímico Víctor Hamburger.
Hacen descubrimientos fundamentales para la comprensión de los mecanismos de control que regulan el crecimiento de las células y  los tejidos; y que permiten una mejor comprensión de las causas de algunos procesos patógenos como los defectos hereditarios, mutaciones degenerativas, etc.
Obtuvieron el premio Nobel de medicina en 1986.

DOROTHY CROWFOOT (1910 - 1994)

Bioquímica inglesa, nacida el El Cairo y Premio Nobel de química en 1964. Entre sus descubrimientos podemos destacar la explicación de la estructura de la vitamina B-12. Con ello puso de relieve la importancia que tiene para combatir y prevenir la anemia perniciosa.  En 1969 descubrió la estructura de la insulina.

GERTRUDE BELLE ELION (1918 - 1999) y G.H. HITCHINGS y J. BLACK

Bioquímica norteamericana, que en 1988 recibió el Premio Nobel de medicina, junto con G.H. Hitchings y J. Black, por sus investigaciones sobre los tratamientos médicos.
Sus investigaciones fueron la base para el desarrollo de una serie de nuevos medicamentos de gran importancia.

ROSALYN YALLOW (1921- 2011)


Física nuclear de Estados Unidos. Después de doctorarse en física nuclear, comienza a trabajar en el departamento de radioisótopos del Hospital de Veteranos del Bronx, servicio del que fue nombrada directora.
En 1977 recibió el Premio Nobel de medicina por las investigaciones relacionadas con las hormonas y sus avances en el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades del tiroides, la diabetes, anomalías del crecimiento, tensión alta y esterilidad.
Desarrolla la técnica de la radioinmunidad en colaboración con Berson. Ello ha permitido la medición precisa en la sangre de sustancias como las hormonas y enzimas.

GREGORY GOODWIN PINCUS (1903 – 1967)

Biólogo norteamericano considerado el padre de la píldora anticonceptiva. En 1853, Pincus y sus colaboradores demuestran la utilidad de un anticonceptivo oral elaborado con hormonas.
La píldora contenía hormonas femeninas (estrógenos y progesterona) producidas sintéticamente para imitar la acción de las hormonas naturales.

BETTE NESMITH GRAHAM (1924-1980)
Inventa, en 1954, el líquido para corregir errores en los manuscritos y textos mecanografiados. Lo comercializa con el nombre de mistake out (fuera errores).